Por Rogelio Hernández López*
Solicito su comprensión para dirigirme a un público específico, como son las mujeres y hombres que se dedican al periodismo y que les preocupa la defensa de su profesión y la protección del periodismo. Necesito informarles y pedir sus consejos.
Desde el 2000 no amaina el ciclo de agresiones a periodistas. Lo primero lamentable es que en 14 años de violencia no exista una fuente oficial, que con metodología y rigor suficientes pueda informar con precisión el número de agravios, asesinatos y otros atentados violentos.
Las agresiones siguen creciendo exponencialmente. Con datos de Artículo 19 se sabe que en tiempos de Felipe Calderón fueron 946, (cuadruplicaron las 208 del sexenio de Fox) y que durante el primer tercio del actual régimen federal ya rebasan las 550. De los asesinatos hay varias listas pero las que registran menos dan cuenta de 109 personas asesinadas en los tres sexenios, 15 en el actual. Los agravios podrían duplicarse de un sexenio a otro.
La falta de investigación y castigo creó una atmósfera nacional de impunidad que propicia nuevas agresiones en todos lados. Decenas de colegas se encuentran en riesgo. Más de 160 periodistas han solicitado protección al Mecanismo federal y este no ha podido atender a todos.
RESPUESTAS INSUFICIENTES
La presión internacional, las denuncias cotidianas en prensa han hecho reaccionar al Estado. Se han modificado códigos, se creó una ley federal de protección y varias estatales, se han erigido instrumentos de protección en la Segob y en algunos estados, hay algunas fiscalías especiales como la de PGR. Pero es insuficiente. Se necesita una política pública general y en Los Pinos no se dan por enterados.
Varios organismos internacionales tienen programas permanentes de acompañamiento y auxilio a medios y periodistas. Lo más estimulante es que en todas las entidades hay decenas de colegas que se activaron para promover asociaciones de autodefensa y superación profesional. De estos, los más activos han sido la Red de Periodistas de a Pie y la Casa de los Derechos de Periodistas. Pero el ciclo infausto no cesa. Hace falta más periodistas activistas para la protección, y que presionemos más al Estado.
MI DILEMA
En 2010 un grupo de 18 periodistas y abogados coincidimos en crear una asociación civil como una respuesta al periodo de emergencia, la Casa de los Derechos de Periodistas (CDP). En ese año y en 2013 la Asamblea Legislativa y el Gobierno del Distrito Federal apoyaron con recursos públicos, para que pudiera implementar sus programas de protección a colegas de todo el país. Pero en 2014 ya no lo hicieron. Ni siquiera se construyó la Casa Refugio que habían anunciado. La CDP, por falta de recursos tuvo que deshacer el Equipo Ejecutivo de siete personas que cobraban salarios.
Desde el mes de agosto cumplo honoríficamente, con algunas tareas como coordinador de protección a periodistas de la CDP. En unas semanas entregaré esa responsabilidad. Al mismo tiempo, caducará mi función de 2 años como miembro del Consejo consultivo del Mecanismo de Protección de la Segob. Allí podría competir para ser reelecto otros 4 años, pero aún no lo decido.
De todo lo anterior surge mi dilema que debo resolver antes que termine octubre: continuar aportando, como activista, a la protección del periodismo y los periodistas, como desde hace más de cuatro años, o bien esforzarme para regresar a la profesión que he ejercido desde 1977 (33 años). Ayudaría mucho que alguien entendiera mi situación y experiencia para emplearme como periodista o como protector de periodistas. Para resolver el dilema comencé a pedir consejos y respaldo entre mis pares de todo el país.
DESEMPEÑOS Y RESULTADOS:
Mientras, creo que estoy obligado a informar a mis colegas de las responsabilidades asumí en estos años. Por eso les ofrezco los datos principales de los informes que rendí el 8 de agosto a los Asociados de la CDP y el 9 de octubre a los miembros del Consejo Consultivo del Mecanismo.
“De agosto de 2010 a junio de 2011 fui el primer Director Ejecutivo de la CDP. Después solicité hacerme cargo de su Programa de Protección a Periodistas. De entonces a la fecha coordiné más de 130 intervenciones de protección (cautelar, correctiva y preventiva) para atender a 1 mil 100 personas vinculadas al periodismo….soy autor del Protocolo general de procedimientos de protección de la CDP, del Prontuario de recomendaciones (estrategia) para fortalecer a periodistas vulnerables de México y colaborador de la Guía jurídica para el ejercicio profesional del periodismo en México. Entre septiembre y octubre de 2012, fui electo como integrante del Comité de Protección en el DF, del Mecanismo federal y de la Comisión Nacional Pro Leyes para Conferencia Permanente de Congresos Locales (Copecol)”.
“De marzo de 2011 a septiembre de 2014 fui corredactor de la de la Iniciativa de Ley para la Protección del Estado de Hidalgo; corredactor de la Iniciativa de Ley Federal de Protección, ofrecí asesoría y acompañamiento a diez proyectos de ley de protección a periodistas en San Luis Potosí, Quintana Roo, Oaxaca, Morelos, Nayarit, Michoacán, Querétaro, Estado de México, Guerrero, Nuevo León y Durango; asesorías para reformar los códigos penales de Michoacán, Quintana Roo y Oaxaca…
“Capacitación para protección preventiva. Entre agosto de 2012 y marzo de 2014 fui coorganizador y profesor de 29 Talleres de Autoprotección para unos 700 periodistas en las ciudades de Ixtapa-Zihuatanejo; Huejutla, Hidalgo; Cuernavaca, Morelos (3); Puebla (3); Oaxaca (3); San Luis Potosí; Querétaro; Nayarit; Michoacán (5); Yucatán, Quintana Roo (2) Acapulco, Ciudad Victoria, Tamaulipas y DF (3). Adicionalmente, fui nominado y electo para impartir la Cátedra de Periodismo Pablo de Villavicencio del Colegio de Sinaloa (30 horas) y añadí ocho conferencias-taller sobre la Naturaleza de los periodistas en otras tantas regiones de Michoacán para unos 200 colegas…”
Posdatas.- Espero sus Consejos. Para leer el informe completo pueden consultar el blog: http://consejoconsultivomeca.wordpress.com/
* Rogelio Hernández López es reportero desde 1977. Aun Coordinador del Programa de Protección a Periodistas de la Casa de los Derechos de Periodistas; y hasta el 30 de octubre integrante del Consejo Consultivo del Mecanismo de Protección a Personas Defensoras de los Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación.
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