Miradas de reportero
Por Rogelio Hernández López
Uno de esos hechos harto trascendentes, para una sociedad en su conjunto, ocurrió el 15 de noviembre en Ciudad Universitaria, pero fue poco difundido en los grandes medios de prensa porque unicamente es del interés de algunos sectores, todavía.
Los medios de prensa y los periodistas somos uno de los sectores que debiera interesarle lo que ocurrió ese día en la Facultad de Ciencias Políticas (FCPyS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En una sola jornada se realizaron allí varias acciones:
Primero, se conmemoró el quinceavo aniversario de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) una asociación civil que, poco a poco y cada vez con mayor calidad, ha brindado servicios invaluables a la sociedad mexicana, a los sistemas de comunicación social públicos y privados, al periodismo, a los periodistas… Tres lustros de aportaciones de calidad.
Segundo, para reflexionar en aquella jornada la AMEDI reunió a personajes, probablemente, de los más sobresalientes o influyentes en su área. Entre todos repasaron los temas del interés coyuntural que debieran interesarnos a todos los periodistas, porque nos son útiles y necesarios para actualizar nuestras visiones, capacidades y el ejercicio profesional.
Los niveles de calidad de las participaciones de la AMEDI y sus asociados se reflejó en esa jornada por su 15 aniversario en CU. Cito como ejemplo a las personalidades que estuvieron, aportaron y debatieron en una sola jornada. Ellas y ellos representan la trascendencia que ya alcanza esta asociación. Ponderemos:
José de Jesús Orozco, ex presidente de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH);
Gabriel Contreras Saldívar, comisionado presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT):
Armando Carrillo Lavat, presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado de Mexicano (SPR);
Néstor García Canclini, profesor investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), otro de los investigadores más reconocidos;
Raúl Trejo Delarbre, presidente del Consejo Consultivo, uno de los más reconocidos expertos en los temas de regímen y comportamiento de los medios;
Rodrigo Santiago Juárez, director general del Programa de Agravio a Periodistas y Defensores Civiles de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH);
Lilia Vélez, integrante de Amedi Puebla;
Guillermo Orozco, responsable de la Cátedra de la UNESCO sobre Alfabetización Mediática Informacional de la Universidad de Guadalajara.
Por supuesto, Jorge Fernando Negrete Pacheco, presidente de la Amedi;
Y el momento de mayor significancia fue la entrega de reconocimientos especiales a otros cinco socios muy trascendentes:
Beatriz Solís Leree, fundadora de la Amedi, ampliamente popular por sus trabajos académicos y hechos para el Derecho a la Información en México;
El experto en el sistema de medios públicos y defensor de las audiencias de canal 22, Gabriel Sosa Plata;
Alma Rosa Alva de la Selva persistente investigadora en Tecnologías de la Información;
El apasionado y polémico periodista Jenaro Villamil, y
Carmen Aristegui, periodista que no se originó en el reporterismo sino como académica de alto nivel, tasbié premiada estos días en Estados Unidos.
El periodismo y la Amedi
Cuando se fundó la AMEDI, fuí invitado como socio sin contar con título profesional alguno. Quienes me invitaron entonces eran, y son, amigos que además presuponen que aun hay que gente que se forma bien como autodidacta y que puede participar a su nivel. Pero no acepté por el pundonor de reportero y por no invadir áreas de los académicos. No soy parte, pero sigo a la asociación cómo si lo fuera.
Para que esta columna no siga pareciendo propaganda, mejor recomiendo a colegas de todo el país entrar al sitio de la asociación (http://www.amedi.org.mx) para que verifiquen que todo lo que producen nos es terriblemente útil: trabajos del andamiaje jurídico del derecho a la información, sobre los derechos y defensa de los públicos, de políticas públicas en México sobre transparencia, debates acerca de lal derecho de réplica, de las nuevas formas de censura, de la concentración monopolica de los medios, de la conversión tecnológica y así. Es más, allí podemos inscribirnos para que nos envíen el boletín diario con noticias de todos esos temas.
La AMEDI ha conjuntado y/o elaborado trabajos sobre casi todo lo que un periodista mexicano debiera saber. Y digo casi porque a mi parecer una área que aún tiene muy poca epistemología es el de condiciones y ejercicio profesional de los medios de prensa y los periodistas mexicanos, más allá del aspecto económico y del tema plañidero de las agresiones, pero que debemos seguir denunciando cada que ocurren.
A lo largo de estos 15 años no he perdido de vista lo que hacen en AMEDI, hasta pelearse con discusiones o por los procedimientos para realizar sus elecciones internas y sus resultados, pero al final la asociación persiste. Con todo y eso, sin ser asociado, he crecido mucho profesionalmente con los ensayos, artículos, investigaciones, comunicados, foros y la amistad que me regalan sus muchos de sus asociados.
Una mala
Y de todo lo que pude enterarme de esa conmemoración en CU apareció otra noticia. La AMEDI no tiene los recursos económicos suficientes para continuar trabajando como hasta ahora. Pude ver un
cartel que se hizo JPG para redes sociales donde se pide a todas las personas apoyo económico. #fondealabatalla es el lema de la campaña de recolección de fondos que iniciaron; campaña en la que se informa que los miembros del Consejo Conultivo y Socios aportarán mil pesos y los afiliados que deban cuotas que paguen la mitad “y nos olvidamos del adeudo”. Si creo que necesitan mucho apoyo y no solo moral para que sigan aportando como hasta ahora.
Creo que la sociedad mexicana, sus partes más enteradas y activas tienen que seguir desarrollando sus organizaciones civiles. La AMEDI es una muestra de como contribuir a la construccción de tejidos ciudadanos diferentes, especializados, influyentes. Muchos periodistas necesitamos a la AMEDI . Debería haber más ONGs como ésta.