Metztli Beltrán
En los dos últimos años, los actos delictivos han logrado superar a las instancias gubernamentales dispuestas para resguardar la seguridad de los ciudadanos, incluso las detenciones y linchamientos realizados por la sociedad organizada se han incrementado como una medida a priori improvisada por los mismos, donde de acuerdo a los oaxaqueños el sistema penal de Juicios Orales ha sido una protección más para aquellos que les gusta delinquir y que ahora impera en el derecho a la presunción de inocencia, además, la falta de denuncia de las víctimas hacen que se atrofie el procedimiento legal debido a la falta de credibilidad en dichos órganos defensores de la justicia.
Y es que en plena luz del día se consuman los ilícitos en sus diferentes modalidades, desde el robo de las tomas de agua, tubería de cobre, medidores, a casa habitación, tapaderas de alcantarillas, baterías de automóviles; asaltos a mano armada contra negocios, peatones y tarjetahabientes, son lo más cotidiano en el primer cuadro de la ciudad de Oaxaca. Sumándose a la lista de los delitos usuarios y conductores del transporte público.
En estos últimos casos, recientemente se han dado a conocer la detenciones que realizan vecinos organizados o comerciantes afectados a presuntos ladrones, donde la justicia por propia mano muchas veces ha terminado en linchamientos, otras más solo los amarran a un poste o un árbol mientras llega la “autoridad” para remitirlo y juzgarlo conforme a la leyes penales, pero contrario a los casos donde no los entregan los matan, bajo el argumento de que si los entregan vuelven a salir libres por el sistema penal reciente, por ello y por la seguridad de los habitantes, prefieren ultimar con la vida de estos.
Recientemente, a través de las redes sociales, se dio a conocer un video donde se puede observar a dos sujetos bajando de una unidad de transporte público para atacar a un individuo que esperaba en una parada de autobús, lo despojan de sus pertenencias y en un descuido de los maleantes, la víctima saca su arma de fuego y dispara a quemarropa contra uno de los asaltantes, escapando del lugar. Mientras que el agresor herido es transportado al Hospital General “Dr. Aurelio Valdivieso” para su pronta atención sanitaria, donde recibe el rechazo de los pacientes y familiares que ante la fuerte demanda de población que tiene, se indignan al saber que una persona no grata ocupa un espacio que se le niega a otro ciudadano enfermo.
Por su parte, la Fiscalía General de Justicia de Oaxaca (FGJO) abre carpetas de investigación de los casos sin prosperar a una detención efectiva, ya que cuando lo hace por “falta de pruebas” en menos de 24 horas el malhechor recupera su libertad. En tanto, hace circular a través de grupos de redes sociales fotografías de los sujetos detenidos en flagrancia o acusados por algún otro delito.