Julisa Sánchez
A través de un documento firmado por la Secretaría General de la Sección 96 del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Sindicato Nacional de los Trabajadores de Salud (SNTSA), dirigido a la Directora General del Hospital Regional de Alta Especialidad de Oaxaca (HRAEO), Doctora Alba Vásquez Palacios, en donde solicitan cuarentena urgente para el nosocomio, asimismo, alertan sobre el número de contagios a nivel nacional que se aproxima a los 900 contagios, con 23 defunciones por Covid 19.
En ese sentido, la dirigencia de trabajadores de salud alertaron que hasta el momento no se han realizado las pruebas de detección para el personal, por lo que advirtieron que el virus continúa y se propaga en familiares, usuarios y compañeros de trabajo.
Ante ello, exigieron se realicen las pruebas de manera permanente al personal que labora directamente con pacientes de covid-19, extendiéndola a sus familiares.
De esta manera, los focos rojos se han encendido en el Hospital Regional de Alta Especialidad de Oaxaca, en donde se mantiene el hermetismo ante el colapso.
Hasta el momento, la entidad oaxaqueña solo cuenta con el Hospital General “Doctor Aurelio Valdivieso” para la atención médica de nuevos casos de Coronavirus, nosocomio que se encuentra colapsado desde hace varios años. La falta de medicamentos, insumos, material, personal, etcétera, ha sido la denuncia diaria de los trabajadores, peticiones que han sido ignoradas por los Servicios de Saludos de Oaxaca (SSO).
Otro de los lugares que han sido habilitados para recibir a pacientes infectados con coronavirus, es el Centro de Salud Urbano No. 1 “Dr. Manuel Martínez Soto”, ubicado en la Calle de Mina en el Centro Histórico de Oaxaca, sin embargo, la llegada constante de pacientes se ha realizado sin extremar precauciones para evitar la propagación del virus, por lo que a través de imágenes ya se ha denunciado la alarma sanitaria para que los vecinos de la zona estén alerta.
Todas estas denuncias y nuevos casos de Covid-19 se han buscado informar a las autoridades sanitarias para que pongan manos en el asunto y eviten más casos y muertes por el virus, pero la omisión de los SSO ha prevalecido.