Julisa Sánchez.
Debido a los recientes robos a mano armada, asaltos a transeúntes a bordo de motocicletas, ejecuciones, daños, lesiones, hurto a comercios, automóviles y casa habitación, que refleja la inseguridad que se vive todos los días en las calles del Estado de Oaxaca, la venta de equipos de videovigilancia se ha disparado y son cada vez más los ciudadanos que optan por el circuito cerrado de televisión (CCTV) en sus hogares y negocios.
Dichos equipos constan de cámaras de video colocadas en accesos y puntos estratégicos del inmueble a custodiar, los cuales graban el movimiento y algunos hasta el sonido de las acciones minuto a minuto, transmitiendo el material audiovisual a un dispositivo con internet, como un monitor o el propio teléfono celular.
Cabe resaltar que existe una extensa variedad de estos equipos de alta tecnología, desde los más sencillos hasta los más complejos que graban en modo nocturno con una alta definición en la imagen, los cuales van desde los 1 mil hasta los 50 mil pesos, más el costo de la instalación y cableado.
Sin embargo, esta demanda comercial no detiene los altos indicies de inseguridad, por el contrario, han aumentado las denuncias a través de videos y fotografías al momento de los ilícitos denunciados a través de las redes sociales.
Las comunidades con mayor índice delictivo y ausencia de estabilidad social, consideradas por las propias autoridades como focos rojos, son el Papaloapan, Valles Centrales, Mixteca, Costa e Istmo, prolongándose a la Sierra Norte y Sur, es decir, todo el estado se encuentra en una crisis de seguridad que se agudiza ante la falta de resultados de las estrategias contra la delincuencia, a través del gabinete de seguridad del Ingeniero Salomón Jara Cruz, integrado por la Secretaria Ejecutiva del Sistema de Seguridad Estatal, Karina Barón Ortíz, el Subsecretario de Prevención y Reinserción, Roberto Claudio Castillo Ramírez, el titular de la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Iván García Álvarez y el Secretario de Gobernación, Jesús Romero López.
Mientras tanto, ya se vuelven a mirar las lonas contra la delincuencia en cada barrio, colonia o municipio de Oaxaca, en algunos casos, la justicia por propia mano se ha manifestado ante el hartazgo social y la inoperancia de las autoridades estatales en turno.