Julisa Sánchez.
Con un millonario presupuesto que reciben anualmente los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), poco han hecho por garantizar el derecho universal a la salud de los ciudadanos, mucho menos de los más vulnerables: los infantes que viven bajo un diagnóstico de cáncer quienes requieren de tratamientos y costosos medicamentos, donde la iniciativa privada y solidaridad ciudadana no es suficiente, ante una autoridad negligente, en los últimos dos años la diputada local Lizett Arroyo Rodríguez ha donado su salario para solventar la tan necesaria medicina, poniendo el ejemplo a los responsables de la salud pública en el Estado.
Sobre las donaciones, la legisladora oaxaqueña es la única de los diputados locales, nacionales, así como senadores y cualquier funcionario público, que otorga los recursos que le corresponden como pago de honorarios para comprar los medicamentos oncológicos que benefician a niños que padecen de algún cáncer y están bajo observación médica en el Hospital de Especialidades de Oaxaca.
En diversos discursos, la misma doctora Alma Lilia Velasco Hernández, titular de los SSO, ha declarado la terrible crisis que vive el sector salud, sin embargo no informa sobre la aplicación del millonario recurso que cada año recibe su dependencia, donde es visible que el Hospital General “Dr. Aurelio Valdivieso” continúa con una sobrepoblación de pacientes, aunado a la falta de medicamentos, infraestructura y personal, además de no contra con herramientas, elevador, camillas, lavandería, etcétera, y se agrava con la falta de infraestructura y mantenimiento a los pequeños espacios de salud en las 8 Regiones, donde la historia se repite.
Lejos ha quedado el discurso del Ingeniero Salomón Jara Cruz de acabar con la corrupción para dar a los oaxaqueños una mejor calidad de vida en obra y servicios, salud, educación, seguridad y justicia, a más de un año de su gobierno las graves problemáticas heredadas por el Maestro Alejando Murat Hinojosa se han complicado.
Spanish