Omar Santiago Ricárdez
Miles de aficionados esperaron al segundo tiempo para poder ingresar al nuevo estadio del Tecnológico y disfrutar del encuentro entre los Pumas y Alebrijes
La total desorganización del gobierno del estado de Oaxaca y de la directiva del club “Alebrijes” destacó durante la inauguración del Estadio Tecnológico pues la falta de seguridad, reventa de boletos, violencia en las gradas y miles de aficionados que no pudieron ingresar en el tiempo marcado para el inicio del encuentro entre los Pumas de la UNAM y los Alebrijes, fueron el factor principal de este importante evento deportivo.
“¡No chinguen!, abran las puertas, también somos oaxaqueños y venimos apoyar a los Alebrijes”, decía un padre de familia al momento en que el árbitro central iniciaba el partido de futbol.
La desesperación de los aficionados se reflejaba aún más cuando el equipo visitante anotó el primer gol, para poner a los Pumas en la ventaja.
“Ya metieron gol los pumas, y esta pinche cola que no avanza ¡Devuelvan las entradas¡ expresó un aficionado de los universitarios”.
Muchas inconformidades fueron expresadas al momento en que la larga “fila” avanzaba lentamente.
Fue al finalizar el primer tiempo cuando las puertas del sector sur fueron abiertas dando una estampida en los alrededores del estadio del tecnológico para ingresar sin control miles de aficionados, durante la estampida dos personas fueron arrolladas por la multitud.
Al interior del Estadio, era muy comentada la inauguración por parte del Gobernador del Estado, Gabino Cué Monteagudo, mientras que en las esquinas se lidiaban a golpes aficionados de ambas escuadras.
Finalmente, el encuentro culminó con un empate de uno a uno entre los universitarios y Alebrijes de Oaxaca, un partido que no convenció a los oaxaqueños.
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