Said Hernández
“Tu casa, el reflejo del desorden de tu vida”, dijo un escritor
Como lo dicta la tradición de la Independencia, cada 15 de Septiembre en punto de las 11 de la noche, desde el balcón principal del Palacio de Gobierno Nacional, Estatal y Municipal, o alguna plaza cívica, se conmemora el grito de la independencia, haciendo un tributo a la figura del cura Miguel Hidalgo y Costilla.
En Oaxaca, la vieja tradición, se realiza desde hace varios años en un ambiente de malos olores y pésimo aspecto, entre mecates y fierros viejos que son utilizados para las estructuras de los ambulantes, los cuales, no solo han invadido los pasillo del patrimonio cultural de humanidad, si no también, el zócalo que se encuentra repleto de ellos en complicidad y solapamiento de la autoridades.
El Palacio de Gobierno de Oaxaca, secuestrado por las “organizaciones sociales”, indígenas triquis y ambulantes independientes, es utilizado en su fachada como almacén, baños y dormitorios por los que se dicen esperar una solución a sus demandas.
Los gobiernos entrantes y salientes, poco han hecho por liberar y rescatar el inmueble que fue construido en el año de 1832 y que representa una estructura estilo neoclásico, además de que en su interior se encuentran dos murales referentes a la Conquista e Independencia de México, obras del maestro Arturo García Bustos.
Los mecates que sostienen los focos viejos en colores rojo, verde y blanco y que son colocados desde el quiosco del zócalo al balcón del palacio serán nuevamente testigos de la tristeza en la que se encuentra sumergida el Palacio de Gobierno del Estado de Oaxaca.
A pocos días de esta celebración, el mandatario oaxaqueño, Alejandro Ismael Murat Hinojosa, ya prepara el grito y el ensayo para recibir la bandera de México, la cual hondeará en lo más alto de la plaza, desde ahí será testigo de este breve escrito.
Por su parte, empresarios, locatarios y comerciantes del primer cuadro de la ciudad de Oaxaca, han solicitado y agotado todos los procesos legales, administrativos y de diálogo para que los gobiernos, tanto Estatal como Municipal, limpien las calles de ambulantes en pro del bien común, tanto para los ciudadanos como para el turismo, sin embargo dicha solicitud hasta el momento no ha tenido respuesta favorable.