En su primer discurso como Gobernador no presentó un plan de desarrollo para las 8 Regiones
David Ortiz.
Desde temprana hora, este primero de diciembre del 2022, se veían desfilar en las calles autobuses, camionetas y vehículos repletos de militantes del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) en Oaxaca, con rumbo al Cerro del Fortín en donde desde la rotonda de las azucenas el ahora primer mandatario estatal, Salomón Jara Cruz, celebraba junto a sus seguidores la toma de protesta, entre música de banda y bailes de la Guelaguetza, así como la explosión repentina de diversa pirotecnia, mientras que la ciudad se paralizaba por la masiva marcha de los mentores de la Sección 22 que partió desde el Monumento a “Benito Juárez” del crucero de la Agencia Municipal de Viguera hacia el Zócalo, encabezada por su reciente dirigencia, con el objetivo de fijar su postura “combativa” ante el nuevo gobierno.
También se hizo presente en las calles, oficinas, hospitales, parques, pueblos, barrios, colonias, etcétera, la incertidumbre de los oaxaqueños ante la falta de un plan de desarrollo para la entidad, así mismo de acciones que den solución a los múltiples conflictos sociales que aquejan la estabilidad social de Oaxaca.
En ese sentido, basta recordar que desde el primer minuto que el gobernador fue electo, la crítica ha estado presente por una ausente promesa de campaña estructurada y efectiva que devuelva la paz y el progreso para el Estado, situación que se agudizó el pasado 9 de noviembre, día que se presentó al gabinete oficial de Salomón Jara en una primera parte con funcionarios públicos que no han demostrado tener una trayectoria honesta y productiva en beneficio social, por el contrario, se reciclaron personajes de la política que solo han abonado al declive social y económico.
Mientras tanto, en un acto masivo en el Auditorio Guelaguetza, se ventila un primer derroche de recursos, dejando a un lado la famosa “austeridad” que caracteriza y es principio fundamental del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, fundador del partido MORENA.
Además, durante la entrega recepción que se realizó al interior del Palacio de Gobierno con el exmandatario Alejandro Ismael Murat Hinojosa, se observa en una gráfica a ambos homólogos ataviados de guayabera blanca y pantalón negro, dándose la mano y con una gran sonrisa, situación criticada por los oaxaqueños, ante la grave situación en que se deja el Estado, con una deuda multimillonaria, despojos, pobreza, corrupción, impunidad, inseguridad, feminicidios, ejecuciones, falta de servicios básicos y obras inauguradas con premura aunque inconclusas.
Así inicia el sexenio de Jara Cruz, entre protestas, conflictos sociales y crisis en los sectores de Oaxaca.