Said Hernández
Luego de darse a conocer la renuncia de Alejandro Ismael Murat Hinojosa al Partido Revolucionario Institucional (PRI), la respuesta de la militancia priista fue severa, acusando al ex mandatario oaxaqueño de traidor y corrupto, además de entregar el poder al Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), al término de su mandato y bajo condiciones de impunidad a Salomón Jara Cruz.
Lo anterior, de acuerdo a versiones que se afirman en lo publicado por la estructura del PRI a nivel federal, estatal y municipal.
La noticia difundida en redes sociales fue contestada por el también exmandatario de Oaxaca, Ulises Ernesto Ruiz Ortiz, quien acusa a la familia Murat de ser los responsables del Cártel del Despojo y del desfalco millonario al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT), cuando Alejandro Murat fue director del organismo público federal.
“Exprimieron al PRI y ahora que ya no les sirve, los Murat se van a MORENA. Todo para tratar de salvar el pellejo después que se descubrió el Cártel del Despojo en Oaxaca, el desfalco al INFONAVIT y otras pillerías. @alejandromurat”, escribió Ruiz Ortiz en su cuenta oficial de X (Twitter).
Con ello, la afirmación del gobernador de Oaxaca, Ingeniero Salomón Jara Cruz, de recibir un Estado en ruinas y con altos índices de corrupción se hace más latente, sin embargo, a un año del actual gobierno no hay servidores públicos de alto rango o cercanos a Alejandro Murat detenidos o bajo proceso judicial, por el contrario, algunos se pasean en el extranjero con total impunidad.
Mientras tanto, la carrera política de Alejandro Murat se apunta a ocupar el cargo de Senador, estrategia política que se ventilará en los próximos días al ser incorporado al cuerpo de campaña de Claudia Sheinbaum, candidata inscrita para contender por la Presidencia de la República en los próximos comicios, afirmando la excelente relación que mantiene el exgobernador con Andrés Manuel López Obrador, Presidente de la República Mexicana.
Finalmente, Oaxaca mantiene su lugar de pobreza extrema en el País, donde sexenios pasan y las pugnas por el poder se hacen más evidentes, como es el caso de Murat y Ruiz Ortiz.