David Ortiz
Un Oaxaca con gobernabilidad, crecimiento económico, reducción de pobreza y seguridad, son los ejes del “Modelo Oaxaca” que presentará Alejandro Ismael Murat Hinojosa al País, siendo su ruta para destacar en la política nacional.
Sin embargo, estos famosos resultados que son letras de los constantes discursos del ejecutivo en las diversas plazas sociales, han sido derrumbados por señalamientos de pudrición, no solo de los candidatos a la gubernatura, sino también por el pueblo de Oaxaca a través de las distintas demandas sociales que recolectan dichos aspirantes a la silla gubernamental.
En tanto, destacan en esas demandas y propuestas de campaña, un rescate económico, resultados inmediatos en seguridad y justicia, restructuración en el sistema de salud que fue pulverizado por la pandemia del Covid-19 y que dejó destruido a ese sector, así también, educación de calidad que ha sido una constante en las 8 Regiones al perderse la rectoría de la institución por parte del Estado. Además, la pobreza extrema que mantiene en Oaxaca es un reflejo nacional que ubica al Municipio más pobre del País en la Entidad que es Santos Reyes Yucuná, ubicado en la Región de la Mixteca.
Es pues, el Modelo Oaxaca, solo un sueño en el que todos quieren despertar y vivir, pues de todas las magnas obras anunciadas al inicio de la administración estatal actual ninguna fue concluida.
Su autor intelectual, Alejandro Murat, será en los próximos meses, un nuevo cuadro que adornará el salón de los exgobernadores del Palacio de Gobierno, junto a Gabino Cué Monteagudo, Ulises Ernesto Ruiz Ortiz y su padre José Nelson Murat Casab, todos ellos escribiendo en la historia negra del Estado sexenios que han sido los protagonistas de colocar a Oaxaca en el último lugar en desarrollo de México.
Otro de sus logros personales del actual gobernador es la deuda de cinco mil millones de pesos al erario público, aprobada por la legislatura pasada conformada en su mayoría por diputados morenistas, que hasta el momento no se ha rendido un informe de dónde fue aplicado el millonario recurso, que en nada ayudó al bienestar social de los oaxaqueños, por el contrario solo recrudece la crisis económica pública.