En el marco del Cuarto Centenario del inicio de relaciones de amistad y cooperación entre México y Japón, el Gobernador Gabino Cué reitera el deseo de que esta visita fortalezca la relación entre ambos Pueblos.
El Príncipe Akishino afirma que México es un país con el que han cultivado una gran historia, por lo que externó su interés por fortalecer los lazos bilaterales entre ambos Pueblos.
Interesados por conocer la herencia cultural y vasta riqueza de Oaxaca, los Príncipes Akishino de Japón, se encuentran de visita en la capital oaxaqueña, donde la tarde de este sábado fueron recibidos por el Gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, quien aseveró que con ello se fortalecen de manera creciente los lazos de amistad y colaboración que unen a los Pueblos hermanos de Japón y México.
A su llegada al Aeropuerto Internacional y luego de un saludo fraterno, los Príncipes Akishino reiteraron que Oaxaca es una de las entidades con mayor diversidad cultural e histórica de México, por lo cual eligieron este destino para recorrer los sitios más emblemáticos y conocer la variedad de artesanías que se elaboran. Además externaron su confianza, toda vez que Oaxaca es catalogada como una de las entidades más seguras del país.
A nombre del Pueblo de Oaxaca, el Gobernador Gabino Cué Monteagudo, recibió a sus Altezas Imperiales: el Príncipe y la Princesa Akishino de Japón, a quienes les externó su beneplácito por decidir conocer la capital oaxaqueña.
“Ambos Pueblos somos naciones herederas de una vasta historia y una milenaria tradición que se expresan con vigor en las diferentes manifestaciones artísticas y culturales de nuestro pasado común y de nuestra vida contemporánea”, enfatizó Cué.
Asimismo, el Gobernador del Estado destacó que la presencia, el trabajo y las aportaciones de las comunidades de residentes que han encontrado –tanto en Japón como en México y particularmente en Oaxaca– una tierra fecunda para cristalizar anhelos de vida son otros de los motivos que hermanan y unen a estas dos tierras.
Posteriormente, los Príncipes Akishino convivieron con el Gobernador Gabino Cué en Casa Oficial, donde degustaron algunos platillos de la gastronomía oaxaqueña y disfrutaron una breve presentación de la Guelaguetza. Los Príncipes Akishino se maravillaron al escuchar los primeros compases de la Banda de Música. El ondear de las faldas multicolor de las chinas oaxaqueñas, las canastas floreadas y el baile, cautivaron a los presentes.
Cué Monteagudo compartió con ellos el gran potencial de Oaxaca para impulsar su desarrollo social y económico, y desde luego, dictó que la entidad se ha mantenido como uno de los estados más seguros del país, lo que ha hecho posible que Oaxaca se sitúe como un destino confiable y atractivo para la inversión productiva.
Dijo también que dicho crecimiento se obedece en buena medida al dinamismo de la actividad turística de los destinos oaxaqueños que registran una afluencia cercana a los 5.5 millones de visitantes anualmente.
Baste mencionar –subrayó Cué- que a partir de la firma del Acuerdo de Asociación Económica México-Japón firmado en 2004, la relación comercial de las dos naciones ha logrado alcanzar un valor del orden de los 20 mil millones de dólares anuales, mientras que la inversión de empresas japonesas en México ronda los 8 mil millones de dólares.
En este contexto, se dirigió a las Altezas Imperiales, el Príncipe y la Princesa Akishino para destacar la enorme inversión realizada en los parques eólicos de la entidad, la cual asciende a 3,400 millones de dólares invertidos en el Istmo en lo que va de la administración, lo que ha hecho posible que Oaxaca se coloque como el primer productor de energía alternativa del país, al generar 1,600 megawatts.
“Se trata de un flujo eléctrico suficiente para brindar servicio a cerca de un millón de hogares, utilizando solamente el 22 por ciento del potencial del Istmo de Tehuantepec, para la producción de energía eólica”, dijo.
Posteriormente, los Príncipes Akishino convivieron con artistas y artesanos en el Instituto Oaxaqueño de las Artesanías, donde apreciaron la elaboración de alebríjes, así como de los tapetes originarios de Teotitlán del Valle.
En este encuentro, en el pudieron conocer la riqueza artística de Oaxaca, los Príncipes recibieron un tapete de lana de colores neutros, como recuerdo de su visita a la entidad oaxaqueña.