Complica relaciones con municipios conurbados ante cierre definitivo del Tiradero Municipal.
David Ortiz.
Más de seis meses de administración cumplió la nueva autoridad de la Villa de Zaachila, emanado del partido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Carlos Rigoberto Chacón Pérez, quien no ha podido llegar a acuerdos efectivos con los encargados del basurero y autoridades, conflicto que ya ha dejado ver un muladar en el centro histórico de Oaxaca y municipios aledaños que ahí descargan sus desechos.
En el marco de la Guelaguetza, tal parece que a la autoridad solo les importa la gestión de la fiesta y su derrama económica, sin darle una pronta solución a las demandas más vulnerables y primordiales que afectan el bienestar ciudadano, incluyendo los servicios básicos y las obras.
Innumerables reuniones entre dependencias gubernamentales, el Municipio de Zaachila y otros se han llevado a cabo, de las cuales solo justifican con la fotografía oficial sus llamados “avances”, lo cierto es que los trabajadores de limpieza y habitantes de la zona del basurero señalan que no han sido escuchadas sus súplicas, por lo que ya han tenido que manifestarse en más de una vez, cerrando de forma definitiva la zona de desechos, complicando las relaciones políticas entre los Presidentes Municipales afectados y el edil zaachileño.
Hasta el momento, se continúan las concentraciones de emergencia sanitaria coordinadas por los municipios afectados, en busca de una alternativa que permita sacar la basura de las calles, principalmente de Oaxaca de Juárez, sede de la Guelaguetza 2022. Donde también se especula el cierre al acceso del transporte público de Zaachila hacia la capital del Estado, como una respuesta al cierre del tiradero municipal.
Además, en la Villa de Zaachila, comunidad perteneciente a los Valles Centrales de Oaxaca, las demandas de los habitantes también incluyen la falta de obra, caminos, economía local y proyectos.
Mientras tanto, el Gobernador del Estado de Oaxaca se encuentra en una ceremonia del Benemérito de las Américas en la Ciudad de México, posando para portadas de revistas sociales y haciendo proselitismo en una campaña con aspiraciones presidenciables.
Finalmente, entre dimes y diretes el más afectado sigue siendo el ciudadano que a pesar de cumplir con el pago de impuestos, no cuenta con el servicio de recolección de basura al cien por ciento.