En el Marco de la Glosa del Tercer Informe de Gobierno, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), José Antonio González Anaya aseguró ante senadores de la Comisión de Seguridad Social del Senado que el IMSS no se privatiza, “se va a mantener como una institución pública”.
“El reordenamiento financiero no es un fin, es la manera como el Presidente me ha instruido de garantizar que el IMSS se mantenga como una institución pública, de salud pública para el resto de los mexicanos”, argumentó.
En la comparecencia de González Anaya ante la comisión, que preside el senador Fernando Mayans Canabal, la senadora Maki Ortiz Domínguez, del Grupo Parlamentario del PAN, pidió al funcionario precisar la situación ante el desabasto del biológico pentavalente que previene enfermedades como difteria, tosferina, hepatitis b, neumonías, y qué estrategias se llevan a cabo para solucionarlo.
Asimismo, la senadora María Elena Barrera Tapia, del Grupo Parlamentario del PVEM, preguntó por qué el seguro social atiende a población sin derechohabiencia cuando los estados cuentan con un aparto financiado por el Seguro Popular. Sobre la construcción de una unidad médica familiar por estado, pidió se precisaran los criterios tomados para dicha acción, así como para el arrendamiento de 300 ambulancias.
Por su parte, el senador del Grupo Parlamentario del PRI, Joel Ayala Almeida, cuestionó cómo se garantizará el personal médico en cada una de las unidades referidas.
En tanto, la senadora del Grupo Parlamentario del PT, Layda Sansores San Román, resaltó que en algunos casos la sustitución de medicamentos no da resultados y dijo que desde hace 15 años no se ha aumentado la plantilla laboral en las clínicas.
El senador Jorge Aréchiga Ávila, del PVEM, destacó la implementación de los vales de medicinas en el Distrito Federal, y al respecto cuestionó cuántos centros de canje y farmacias hay en el Distrito Federal, si se han presentado dificultades para su implementación y si ya se tienen resultados.
En su participación, la senadora Lisbeth Hernández Lecona, del PRI, refirió que recientemente se conoció que el Programa Participación Social en las guarderías del IMSS obtuvo el primer lugar en Las Américas, en los premios de Gobierno Abierto 2015. Al respecto, preguntó cómo se tiene considerado replicar esa buena práctica a otros programas sociales dentro del instituto.
Por su parte, el senador Ernesto Gándara Camou, del PRI, preguntó si se tiene un sistema de verificación de anomalías en la sustitución de medicamentos. Al mismo tiempo, dijo que el IMSS no debe de ser privatizado ni hoy ni nunca y pidió al funcionario referirse al respecto.
A continuación, el senador Adolfo Romero Lainas, del Grupo Parlamentario del PRD, felicitó a González Anaya “porque efectivamente el IMSS es una institución noble, es la mejor que tenemos en nuestro país y que desde luego da una atención obrero patronal donde muchas empresas aportan la cuota para que puedan atender a sus empleados y que ese es un dinero fresco que recibe el IMSS”. Asimismo, manifestó su apoyo para implementar políticas públicas para que beneficien más al IMSS, pues la salud no tiene precio.
La senadora Mely Romero Celis, del PRI, reconoció que el tratamiento de diálisis y hemodiálisis para enfermos de insuficiencia renal ha permitido atender a 20 mil pacientes en el país, especialmente en Colima.
El senador del PAN, Gabriel Ávila Ruiz, preguntó sobre las acciones del Instituto ante el aumento de la epidemia del dengue en los estados del sur del país, así como del mosco que transmite el virus del chikungunya, y advirtió que en Yucatán las cifras arrojan que cinco de cada 10 habitantes han presentado sintomatologías de la enfermedad.
Su compañero de bancada, Ernesto Cordero Arroyo, aseguró que con los 17 mil millones de pesos que se busca reasignar en la Cámara de Diputados en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2016 se podrían construir clínicas para la atención del primer nivel, remodelación o ampliación de área de urgencias, o infraestructura hospitalaria.
Al calificar como un gran avance las consultas en clínicas familiares los días sábados, la senadora Hilda Flores Escalera, del PRI, consideró necesario continuar brindando el servicio el fin de semana y ampliarlo a un mayor número de unidades.
Finalmente, el senador Fernando Mayans Canabal, del PRD, cuestionó sobre el proceso de incorporación de 17 nuevas opciones terapéuticas de medicamentos innovadores al cuadro básico del IMSS para el tratamiento de enfermedades, principalmente endocrinológicas, oncológicas y cardiovasculares.
En su exposición, el director general del IMSS, José Antonio González Anaya, destacó que en la presente administración, el número de afiliados ha tenido un aumentado importante, “el número de afiliados al IMSS está creciendo a cerca del doble de la economía”, lo que hace necesario ampliar la infraestructura.
Por ello y ante una situación financiera “con algunos espacios adicionales” –recursos– se impulsa un programa de infraestructura ambicioso con un modelo de construcción y de funcionamiento más utilitario, económico, eficiente que quepa dentro del presupuesto. En este sentido, anunció la construcción de una unidad médica familiar en cada estado de la República en los próximos tres años y que se terminarán de construir 12 hospitales de segundo nivel, con lo que se aumentará la capacidad de manera importante.
El funcionario público también señaló que el Programa IMSS-Prospera atiende a 12 millones de mexicanos de bajos ingresos, primordialmente en áreas rurales sin costo y sin estar afiliados, con el cual, se permitió bajar mortalidad materna de 37 por cada 100 mil nacidos vivos a 22 por cada cien mil nacidos vivos.
Además, indicó que el Seguro Social atiende una población que demanda servicios de salud de más de 70 millones de mexicanos; bajo su régimen ordinario a 59 millones y los 12 millones de mexicanos participantes de IMSS Prospera; y agregó que la población asegurada a través del seguro popular suma poco más de 50 millones.
Por otra parte, subrayó que cuando se recibió la institución se tenía un déficit de cerca de 25 mil millones de pesos al año y que éste se redujo para que este año se cierre en cerca de 10 mil millones de pesos, es decir, una reducción de más del 60 por ciento. Subrayó la importancia del reordenamiento financiero pues ha permitido que la viabilidad financiera de la institución esté a salvo por los siguientes tres años, lo cual, dijo, no quiere decir que los programas y retos de la institución sean menos, pero sí representan un avance.
En las respuestas a los legisladores, José Antonio González Anaya dijo que se trabaja bajo el liderazgo de la Secretaría de Salud en un programa de sustitución y se proporciona una vacuna que no es tan eficiente, pero que se aplica varias veces con un refuerzo, con lo que se obtienen los mismos resultados. Continuará hasta febrero o marzo del próximo año buscando la mayor cobertura posible.
México tiene un gran programa de vacunación desde hace mucho tiempo y no queremos que esto vaya a ponerlo en ningún tipo de riesgo, por lo que prevé que se resuelva pronto mediante un nuevo proveedor de la vacuna o asegurando que con las sustituciones se tenga la misma cobertura.
Respecto al Programa Prospera, dijo que éste puede financiar los servicios de salud a través de los servicios de los estados o de otras maneras, y uno de los proveedores es el IMSS y el IMSS-Prospera; cuando se va a construir una nueva facilidad médica a través de este programa, se verifica que el Seguro Popular no tenga una ahí cerca, y así se puede dividir a la población y ser más eficaces.
Sobre la creación de las clínicas, explicó que se hizo un análisis georreferenciado sofisticado, para determinar dónde se carece de este servicio. Asimismo, expresó que operar un hospital cuesta la mitad de lo que vale construirlo, es decir, hacer el hospital no es el problema, sino tener el presupuesto para operarlo.
Relativo a las ambulancias, señaló que se arrendaron 300 y se sacó el mismo número de las más viejas. El próximo año serán 400 para que de esta manera se renueve la flota cada cinco o seis años, y además se eliminan gastos pues el contrato establece los detalles del servicio, y se propician ahorros directos e indirectos.
A la senadora Sansores San Román le respondió que se ha avanzado pero que aún hay retos. El mejor ejemplo es la parte financiera, pues hay viabilidad financiera para el resto de la administración, pero sigue teniendo un problema financiero complejo.
En cuanto al tema de los vales de medicamentos, González Anaya destacó que al no existir la medicina en la clínica específica, se activa un vale electrónico para acudir a cualquier farmacia del IMSS o a un centro de canje “donde se hace lo indecible” para que siempre haya abasto. El resultado, agregó, ha sido muy bueno, ya que las quejas por desabasto se redujeron en 90 por ciento.
Respecto a las guarderías, dijo que se ampliaron 10 mil lugares adicionales, es decir, de 205 mil a 215 mil y que se hace un esfuerzo para asegurar su seguridad.
Asimismo, informó que en la compra consolidada se busca es conseguir las mejores condiciones de precio y calidad para los derechohabientes y se asegura la máxima transparencia y la competencia. No se intercambia calidad por precio, precisó. Asimismo, recalcó que el IMSS no se privatiza y que se mantendrá como una institución pública.
Respecto al tema del chikungunya, señaló que el Instituto a su cargo se encuentra en alerta ante el incremento de casos que se esperan para el próximo año, pues en lo que resta del 2015 su prevalencia baja debido al clima invernal y a la temporalidad del virus.
Asimismo, en lo relativo al número de trasplantes informó que se busca aumentar mantener la cifra del 10 por ciento anual, pues aunque México ocupa uno de los niveles más bajos entre los miembros de la OCDE en esta materia, en el IMSS se realizan más del 60 por ciento de dichas intervenciones del país.
Finalmente, González Anaya informó que el Instituto eliminará el pase de revista o supervivencia, en la última visita que se realizará por parte de los beneficiarios durante los últimos cuatro meses, se afiliará a aproximadamente 3.5 millones de personas. A ellos se les solicitará un correo electrónico o un teléfono para contar con un contacto con los pensionados.
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