Julisa Sánchez
A un mes del cierre definitivo del tiradero municipal de Zaachila, la situación de emergencia sanitaria se complica día a día en los municipios conurbados de la ciudad de Oaxaca, como es el caso de Santa Cruz Xoxocotlán, Santa Lucía del Camino y Oaxaca de Juárez, principalmente, a quienes les otorgaron un plazo para continuar depositando sus residuos sólidos de solo dos meses, según el acuerdo realizado con los habitantes de la zona oriente de esa comunidad.
Ante ello, el cierre de la zona no permite el acceso a las empresas privadas de servicio de recolección de basura, por lo que inconformes adheridos a las organizaciones sociales del “Sol Rojo” y la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) tomaron las calles del Centro Histórico de Oaxaca, amenazando con tirar los desechos en la vialidad, sino tienen un acuerdo efectivo para continuar sus operaciones.
En ese sentido, autoridades del Municipio de Oaxaca de Juárez desplegaron un operativo de seguridad en caso de que las acciones de los manifestantes se hagan efectivas en perjuicio de la ciudadanía.
“La autoridad municipal de Oaxaca de Juárez, no está en posibilidad de resolver los planteamientos particulares de quienes se dedican a recolectar, por cuenta propia, los residuos sólidos, y estará atenta para actuar, apegada a derecho, para evitar daños a la salud de la ciudadanía. Es importante recalcar que, esta no es una decisión de la autoridad municipal de Oaxaca de Juárez”, argumentó el H. Ayuntamiento en un comunicado social.
Mientras tanto, próximo a concluir el vencimiento acordado para el cierre total del Tiradero Municipal en la Villa de Zaachila, el edil de esa comunidad, Rigoberto Chacón Pérez, no ha mostrado avances de solución a sus gobernados, quienes además exigen entrega de recursos, obras y servicios de urgente necesidad para sus colonias, por lo que la emergencia sanitaria puede desencadenar una serie de movilizaciones que afectaría en mayor escala las relaciones con los municipios vecinos.