EDITORIAL
CANDADOS Y MÁS CANDADOS
No cabe duda que los “famosos” saqueadores de Oaxaca pusieron una serie de trampas para poder escapar de la justicia. Cambiaron leyes con el apoyo de diputados de la LV Legislatura, construyeron hospitales en propiedad privada, contrataron una empresa “fantasma” para el alquiler de cientos de computadoras y que al final de la administración desaparecieron con toda la información que los pudiera implicar. Así mismo, comprometieron el cobro de la tenencia vehicular por varios años, según para el pago de renta de Ciudad Judicial y Administrativa. Clonaron más de 9 mil concesiones para el transporte público. Desviaron recursos para actos proselitistas, abusaron del poder, algunos ex funcionarios son acusados de peculado, de tráfico de influencias, toda una gran corrupción, etc, etc.
Las 27 auditorias practicadas hasta el momento por la Contraloría del Estado ante denuncias por malversación de fondos, o desfalco en dependencias como La Secretaría de Salubridad y Asistencia, La Secretaría de Finanzas, El Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, La Secretaría de Obras Públicas, Coplade, Caminos y Aeropistas de Oaxaca, Secretaría de Turismo, entre otras. Deben continuar su proceso y castigar a los responsables de tanta corrupción, como lo anunció al pueblo de Oaxaca, el Gobernador Gabino Cué Monteagudo.
Y no suceda también como el caso del ex gobernador, José Nelson Murat Casab, que según la Contralora del Estado, Perla Woolrich, “que algunas situaciones ya prescribieron, -es decir- Los delitos que cometieron los funcionarios públicos, se castigan con penas tan leves que pueden prescribir en el transcurso de 6 a 7 años”. Y Murat Casab, “ya se peló”, dejando embarrado a su sucesor.
No cabe duda que este señor, “sí se las sabe de todas todas”.
Como se recordará, este personaje de triste memoria, se invento hasta un “autoatentado” con “la parabrisa”, cuando supo que la Auditoria Superior de la Federación llegaba a Oaxaca a revisar las cuentas del erario público, quedando en la impunidad la muerte misteriosa del policía de la PABIC, Rufino Zárate Ambrosio.
Dos sexenios cuestionados, por los actos de corrupción y abuso de poder.
El Gobernador, Gabino Cué Monteagudo, tiene que hacer realidad su compromiso de campaña, “combatir y castigar los actos de corrupción”.
¡El pueblo exige justicia!.