Gregorio García
La madrugada del pasado sábado 4 de julio del 2015, una llamada telefónica alertó al C-4, donde explicaban que hombres fuertemente armados brincaban las azoteas de las casas habitación de la colonia “Estrella”. Al acudir ante el llamado de alerta, Policías Estatales se percataron que se trataba de un operativo sorpresa por parte de elementos de la Marina, para detener a supuestos secuestradores.
Al lugar, ubicado en la calle Satélite fueron llegando las diversas corporaciones policiacas, lo que hizo más impresionante el operativo, alertando aún más al vecindario. Sin embargo, el control siempre lo mantuvo la Marina.
El cateo se llevó a cabo alrededor de las 3 de la madrugada en una casa de departamentos, donde un sujeto con machete ensangrentado en mano, brincaba sobre las azoteas de las viviendas contiguas, lo cual provocó que los marines iniciaran la persecución y detención del individuo. Más sin embargo, la información fue manejada de forma hermética por parte de las fuerzas federales, pero, extraoficialmente se dijo que se trataba de supuestos secuestradores que aún mantenían a su víctima en cautiverio.
“Los Marines nos pidieron que encendiéramos todas las luces de nuestras casas de forma coordinada para buscar a más de los integrantes de la supuesta banda. Fue algo espantoso” , dijeron vecinos.
En otra versión corrió el rumor que habían encontrado sustancias químicas de “Plutonio” (un elemento radioactivo para armas nucleares). Mientras tanto, las policías oaxaqueñas se mantuvieron al margen del “Gran Operativo”.
Al día siguiente por coincidencia reportaron una mujer muerta en una de las calles anexas.
Hasta el momento no hay una versión oficial de los hechos que mantuvieron en tensión al vecindario de la colonia “Estrella”.
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