Julisa Sánchez
Concluye el periodo de las fiestas de la Guelaguetza 2024, que son alrededor de 15 días de eventos culturales y musicales, mismos que engalanan los dos “Lunes del Cerro” como parte del evento máximo oaxaqueño, sin embargo, vuelve la realidad que aqueja a miles las familias oaxaqueñas en sus 8 Regiones.
La crisis en seguridad y salud, la falta de obra, proyectos y servicios básicos de calidad que permitan a las comunidades del Estado, obtener el bienestar prometido desde hace décadas.
Por ello,” Oaxaca no necesita accesorios”, coinciden ciudadanos: requiere del compromiso de los que gobiernan para subsanar inmediatamente las múltiples necesidades que se extiende también al deporte, cultura y otros pilares del bien común.
En este año, los gastos millonarios que se esfumaron en 15 días, dejaron una gran inconformidad en medio de la protestas y denuncia social, para que esos recursos se apliquen a los sectores que urgen de atención, además de generar proyectos de corto plazo para recuperar lo hermosos de su Centro Histórico, Patrimonio Cultura de la Humanidad, con el arreglo de sus inmuebles, calles, banquetas, Mercados Públicos y sitios turísticos para los visitantes y oaxaqueños.
Por el contrario, los gastos estratosféricos se destinaron a papel, esculturas, invitados, siendo el gasto más visibles en este 2024, algo que reflexionar para el gobierno en turno.
Coincidiendo con el clamor social, “se terminó la fiesta y vuelve la realidad en Oaxaca”.