Maestros de la Sección 22 y Policías Federales sostuvieron al menos tres zafarranchos durante inauguración de la planta de energía Eólica.
David Ortiz
La visita del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto a la región del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, para inaugurar la “Fase II de la Central Eólica Sureste I”, desató tres enfrentamientos entre Policías Federales e integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE).
A la llegada del ejecutivo federal a tierras istmeñas, iniciaron los bloqueos por parte de los docentes en las principales carreteras que comunican a esa región, para posteriormente partir en marcha con destino al evento político que acompañaría el Gobernador del estado de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo.
La marcha magisterial fue detenida por vallas de policíacas, lo que dio origen a enfrentamientos simultáneos en las inmediaciones de la Central Eólica Sureste. Gases lacrimógenos, piedras y cohetones fueron los elementos que se utilizaron en la gresca, sin que se reportaran heridos o detenidos.
Mientras se registraba el último enfrentamiento en el momento más álgido, EPN encabezaba el acto inaugural enviando un mensaje a los Oaxaqueños:
“La Reforma Energética ya es una realidad, y hoy la estamos implementando para que México cuente con más energía, de mayor calidad, a menores precios y sea más verde”.
Por su parte, la dirigencia magisterial encabezada por Rubén Núñez Ginéz, sostuvo, que la visita de Peña Nieto, no era grata para los maestros, por lo que exigían un alto a la reforma educativa y se instale una mesa de negociación urgente para destrabar el conflicto magisterial que se vive en la entidad.
Finalmente, los ánimos se calmaron cuando el Presidente de la República se retiró del lugar, mientras que los docentes advirtieron nuevas movilizaciones en la capital e interior del Estado en los próximos días.
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