Calles, parques y establecimientos comerciales con mayor presencia de la problemática social
Julisa Sánchez
Según una estadística expuesta hace meses por la Sistema del Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Municipal de Oaxaca, son alrededor de 300 indigentes en la capital oaxaqueña, número que podría ya ser superior ante la falta de políticas publicas y coordinación entre los Sistemas DIF Estatal y Municipal. A ello se suma la invasión de migrantes provenientes de los Países del Sur, que han ocupado las calles, avenidas, cruceros, parques y establecimientos comerciales como refugio a su paso por Oaxaca en busca del sueño americano.
La falta de voluntad del Gobierno Estatal que encabeza el Ing. Salomón Jara Cruz para activar un programa emergente para la atención en salud y alimentación para los migrantes e indigentes, es exhibida al aumentar la presencia de la problemática social en Oaxaca.
Inexiste programa de rescate y rehabilitación para indigentes
Los millonarios recursos públicos que deben ser destinados, a través del Sistema DIF Estatal que representa Irma Bolaños Quijano, para la construcción de albergues en donde los indigentes puedan tener acceso a la atención médica, alimentos, aseo y habitación, generando un historial clínico que permita su rehabilitación y un regreso a la sociedad o su canalización a un hospital psiquiátrico para continuar algún tratamiento es inexisten, y es ahí el cuestionamiento de la sociedad ¿Dónde se aplica el recuso público de los oaxaqueños?.
La zona con mayor presencia de indigentes es en la Central de Abasto, en donde se observan a jóvenes y adultos en cuadros de drogadicción y alcoholismo, otros han muerto al exterior de las iglesias y parques del patrimonio cultural de la humanidad.
La falta de cuestionamiento al órgano de gobierno responsable por parte de los diputados de Oaxaca, hace cómplice a los legisladores de un problema que día a día se agrava.
Esclavitud y muerte para migrantes
Buscar el sueño americano tiene consecuencias muy graves para el que inicia su ruta a los Estados Unidos, algunos lo logran y otros pierden la vida en el camino por cualquier causa o son secuestrados por el crimen organizado para incorporarlos a sus filas, lamentablemente en México, existe un alto índice de inseguridad en todos sus sectores, además de una creciente crisis económica que hace un estancamiento de los migrantes en el País.
Al lado de ello, la inexiste política migratoria en Oaxaca hacen que por primera vez el fenómeno social se extienda en las principales calles de Oaxaca de Juárez, ciudad patrimonio mundial de la humanidad, y a pesar de lo que han manifestado funcionaros de primer nivel, en donde afirman que se establecerían a la brevedad albergues comunitarios de atención al migrante, todo es en sentido negativo.
En ese sentido, la sociedad oaxaqueña ya comienza a tener inconformidades por las consecuencias en salud que se genera, principalmente.
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