Gregorio García
Las medidas de salud implementadas a través de decretos y pronunciamientos por parte del Gobierno del Estado de Oaxaca, han sido ignoradas por los habitantes de la entidad oaxaqueña, y es que a principios de la cuarentena los constantes operativos de salud instalados en los accesos a la ciudad capital, principalmente, no fueron respetados, sino por el contrario algunos fueron retirados por actos violentos de grupos sindicales.
Las malas estrategias y los pésimos cálculos de la pandemia en Oaxaca, están reflejando en la desobediencia de los ciudadanos al no quedarse en casa, pues a más de 80 días de cuarentena, la crisis económica se encuentra en severos números rojos, sin que se presente un plan de rescate inmediato hasta el momento.
En ese sentido, el Gobernador de Oaxaca, Alejando Ismael Murat Hinojosa, en un mensaje hecho desde la “Casa del Pueblo” el día de ayer, pidió a los habitantes de los Valles Centrales, un aislamiento total voluntario por 10 días, iniciando el 5 de junio y culminando el día 15 del presente mes. Acto que fue ignorado por los ciudadanos, quienes salen en su mayoría a buscar el sustento diario, con la esperanza de volver a casa con ganancias para poder alimentar a su familia, otros más aún incrédulos de la pandemia salen desafiando el peligro de infectarse, lo que sí es un hecho es que las actividades de una nueva normalidad se comienzan a aplicar en la ciudad de Oaxaca, sin que exista el permiso oficial.
Hasta el momento, Oaxaca se aproxima a los 2 mil casos de Covid-19, que según pronósticos estadísticos los superará este fin de semana, al mismo tiempo se han contabilizado más de 200 muertes por el virus.
Mientras tanto, de los hospitales que cuentan con atención a pacientes con covid-19 anunciado por los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), ya se encuentran saturados, donde hasta el momento no se han anunciado nuevos espacios para pacientes sospechosos y confirmados de coronavirus en Oaxaca.
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